Hoy mi verbo descansa
en juguetonas y leves palabras,
la densa coraza de intelecto
cae en ilo tempore
de Sábado poético.
La tarde se construye de bits
y un anochecer de horizonte de mar.
De la hora azul se desprende un guiño
y Orión justo encima sonríe soberbio.
En mi emepetres suena la misión,
las musas me regalan en la visión
de sus velos sus danzantes presencias,
brindo...
Alzo la chela playera
y es mi propia constelación que bebe.
En trino me recuerdo
y corto el devaneo..
Vuelvo a casa en una nube.